¡Que nadie se asuste!, lo primero que hay que aclarar es que en nada se parece una
ipomea a un gusano.
La ipomea, también llamada don Diego de día o campanilla morada es una planta herbácea que tiene las hojas en forma de corazón y finos tallos con vellosidades. Las flores tienen forma de trompetilla o campanilla y suelen ser de color azul, púrpura, rosa o blanco.
Entonces, ¿qué tiene
que ver todo esto con los gusanos?
Analicemos la
taxonomía de la ipomea a ver si encontramos alguna pista.
En primer lugar,
pertenece a la familia de las convolvuláceas y este nombre deriva del
latín convolvulus que es el nombre genérico de la enredadera. Esto ya
nos puede dar una idea de su actitud para enredarse, para trepar o reptar… como
lo haría un gusano.
La ipomea
tiene, efectivamente, porte de enredadera. Se enreda por sí misma en
estructuras, creciendo a una altura no superior a los 2 o 3 metros.
Veamos ahora su nombre
científico: Ipomoea purpurea.
Como bien sabéis, Ipomoea hace referencia al género y deriva de las palabras griegas :
ips, ipos = "gusano" y homoios = "parecido", por el hábito voluble de sus tallos; y purpurea hace referencia a la especie y es un adjetivo latino que significa "de color púrpura".
Así pues, tenemos que la ipomea
se parece a un gusano por el hábito de sus tallos a enredarse sobre estructuras
para trepar.
Si queréis ver ipomeas
en vivo y en directo, solo tenéis que acercaros al jardín del instituto en
otoño o primavera. Crecen al lado de un arbolito que todavía es pequeño llamado
coscoja.
Os dejo el enlace al
blog del jardín donde hay más información y fotos de esta planta:
http://nuevojardinqr.blogspot.com.es/2014/02/ipomea.html